«Que miras con recelo el lazo aterciopelado…
pero te muerdes, excedes tu aliento asustado.

Sólo tienes que temer, a tu instinto cegado,
mi perversión te apunta, tu fantasía pretenciosa,
con labios secos, ahogados, rezas ocultos pecados.

Sólo tienes que palidecer, ante mi instinto alienado,
mientras el cuero se blande en tu piel acuciosa,
con el bífido látigo, golpeando tus juicios insanos .

Que suplicas… suplicas,
la discreción se turba tanto como tu respiración predica.

La mordaza no reprime el sudor que te acaricia.
Vacilar quisiera en un beso, de lenguas al descubierto,
con tu voz montada en jadeos, que me bañen tus ecos.

Susurrar tu nombre…
tu cuerpo exclamando, de muslos apretados,
desgarrando tu espalda, mientras te entrego mi alma,
desato tu hombría para domar mi cama
de curvas que arden a tu sola mirada.

¡Sudar tu nombre!
tus enrojecidos impactos destrozan las sábanas
arqueo mi ser a tu tacto, mientras te cedo mis palmas,
encuentro el goce en tus ciñentes brazos,
el pulso marca…
Que eres mi amo».

Por: Aris Anastasia -Aris Writer-


#ArisWriter #BookLovers #Escribir #Amarloqueunohace #Autora #Escritor

Si te gustó ¡comparte!

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

You may use these HTML tags and attributes:

<a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong>